REPASO A ALGUNOS TÍTULOS EN FÍSICO DE ESTILO CLÁSICO: AMAZING PRINCESS SARAH Y WALLACHIA

Como ya he dicho en multitud de ocasiones me parece genial que se editen en físico todo tipo de juegos indies de jugabilidad clásica y en muchos casos también de estética de estilo 8 y 16 bits. Para los que nos gusta tener los juegos en formato tangible y engordar nuestra colección y nuestras estanterías esto es cuanto menos una bendición. El problema es que hay tantos que abarcar que no se puede tener ni jugar todo, pero en este blog de tanto en tanto realizaré algunas reseñas basadas en mi opinión personal de aquellos que he podido jugar. También es cierto, y con esto hay que ser sinceros, que se editan tantos títulos que muchos de ellos son de una calidad discutible. Como decíamos en el artículo de Joe and Mac, no todo vale.

Dentro de la compra de juegos me ha gustado bastante lo que ofrece la tienda Impact game. Esta web española aglutina una buena cantidad de juegos procedentes de webs de juegos "limitados" (que en realidad ya no lo son tanto, por la extensa tirada y porque muchos acaban saliendo en retail), como Limited Run o Red Art Games por poner dos ejemplos. A veces incluso nos traen juegos que han sido lanzados en territorio americano por editoras como VGNY Soft, como son los Earth Atlantis y Stellar Interface de Nintendo Switch. Aun así si estáis interesados en algún titulo concreto hay que mirar de reojo la web de donde proceden, ya que en ocasiones se agotan en Impact game pero siguen disponibles en la editora original. Es necesario recordar además que algunas como Strictly limited o la misma Red Art Games son europeas lo que implica que no sufrimos la lacra de aduanas y precios de envío elevados.

AMAZING PRINCESS SARAH

Amazing Princess Sarah es un juego de estética 16 bits editado originalmente por Red Art Games. Controlamos a Sarah una princesa muy apañada que debe salvar al rey secuestrado por un demonio. Bajo esta excusa se presenta un juego de plataformas muy entretenido.

Nuestro personaje tiene la capacidad de poder coger los cadáveres de los enemigos que vamos derrotando con nuestra espada y lanzarlos contra otros enemigos para dañarlos o eliminarlos, pudiendo enlazar muertes de esta forma. Cada tipo de cadáver que se lanza causará un tipo de daño determinado, así por ejemplo si lanzamos un arquero éste causará la caída de tres flechas que dañaran a otros enemigos de la zona. También tenemos la capacidad de saltar encima de los enemigos, esto causará que rebotemos sobre ellos pero no les provocaremos daño ni ellos a nosotros. Para poder avanzar es necesario llegar hasta unos interruptores que al activarlos nos permiten continuar al desbloquear la siguiente zona.

A medida que avanzamos mejora nuestro nivel, que básicamente implica mejorar nuestra vida y el daño que causamos.

La idea es ir atravesando el mapa que nos presentan con mucho componente de plataformas y una gran cantidad de enemigos que podemos ir matando....o no. No estás obligado a arrasar con todo para avanzar,  puedes pasarte las fases a toda velocidad si quieres saltando y esquivando enemigos. Llegaremos hasta sucesivos puntos de control, que nos restaurará toda nuestra vida y desde donde reviviremos si nos matan. El juego es extremadamente lineal no es un metroidvania ni similar.

Al final de cada castillo (ya que en teoría cada fase es uno) nos encontraremos el correspondiente jefe final.

El juego es extremadamente simple en todos sus aspectos, lo que quizás lo hace precisamente atractivo ya que está basado en una jugabilidad completamente retro, sin complicaciones. Lo malo es que es un juego corto, es relativamente sencillo darle una primera vuelta sin demasiadas complicaciones y en poco tiempo. Pero ahí está la trampa. Al auténtico jefe final solo puedes llegar si completas el modo "new game +"  que no es darle otra vuelta al juego, si no 6. 

Sí habéis leído bien, hay que completar el juego 6 veces más, y en cada una de esas veces hay alguna complicación añadida. En la vuelta 2 tienes que ir esquivando tu espíritu vengativo que te persigue por la pantalla, lo que llaman "Angry Princess" que si te toca te quita 15 puntos de vida.

En la vuelta 3, hay que completarlo con la pantalla oscilando como un barco, porque representa que estás borracha o con resaca y además los enemigos aumentan su vitalidad un punto, lo llaman "Drunk Princess". 

En la vuelta 4 pierdes vida de forma constante y tienes que llegar a los puntos de control lo antes posible, pero ganas un doble salto lo que te permite ir más rápido y los enemigos ganan un punto de vida. En la vuelta 5 te quitan la espada, etc etc. Y así sucesivamente.  Lógicamente con completar el juego dos veces ya he tenido bastante, y la verdad es que antes de completarlo en tantas ocasiones he pasado a otra cosa, para ser sincero. Quizás lo retome en algún momento para completarlo totalmente. 

Los final bosses tienen diseños cuanto menos discutibles,
en general todos son bastante feotes y simples en sus ataques
acordes con el tono del juego

Como curiosidad, dos cosas. El juego tienen una banda sonora increíblemente buena teniendo en cuenta el tipo de juego que estamos tratando. Las composiciones me han gustado mucho. Parece una banda sonora más propia de juegos de mayor presupuesto. La otra curiosidad es que la portada del juego en físico viene censurada, la princesa enseña menos escote de lo que debería, comprobareis que al ejecutar el juego la pantalla de inicio no lo está y la princesa nos obsequia con un generoso escote (al menos en PS4,  probablemente en Switch siga censurada)....lamentable que aún tengan que pasar estas cosas en pleno 2022/2023.

En general un título recomendable si tienes claro lo que te ofrece. Disponible en Switch y PS4.

WALLACHIA: REIGN OF DRACULA

Wallachia es un juego de desplazamiento lateral que podemos clasificar como "Run and Gun" editado por Pixel Heart. Guarda ciertas similitudes con Shinobi. Nuestra heroína debe salvar a su hermano y de paso acabar con el mismísimo Drácula que aterroriza a la población de Valaquia. Nuestra personaje puede usar una espada para ataques a corta distancia y un arco con diferentes tipos de flechas, que recogemos durante el juego, para ataques a larga distancia. Este aspecto es lo que confiere al juego el componente de disparos propio del género, ya que las flechas normales son infinitas. Podemos lanzar un ataque cargado más potente con nuestro arco al mantener pulsado el botón y soltarlo, mejorable durante el juego (aumenta la velocidad al cargar) junto con la del ataque normal que aumenta su daño.  

Durante las fases hay partes de plataformeo donde debemos ir saltando para ir avanzando, para lo cual disponemos de un salto doble. Pero también podemos realizar una evasión por el suelo. 

Disponemos de cuatro ataques especiales que sólo podremos lanzar si recogemos el suficiente número de esferas, las cuales liberan los enemigos. Dependiendo del tipo de ataque nos piden más o menos esferas. El más sencillo de utilizar y el que menos coste tiene es el de lanzar a nuestro lobo contra los enemigos frontalmente, causando un importante daño. Pero también podemos ser invulnerables de forma temporal, llenar la pantalla de fuego, que dañará a todos los enemigos presentes, o potenciar al máximo nuestro ataque temporalmente (pero como decía antes, tienen un mayor coste).

Durante la partida podemos mejorar nuestra vitalidad y nuestro ataque. La vitalidad puede aumentarse simplemente al avanzar ya que nos proporcionarán piedras rojas que la aumentarán un punto automáticamente. Las piedras azules sirven para recuperarla si nos han dado, ya sea un punto o la llenarán por completo (a veces hay que abrir cofres para ello). 

De forma puntual podemos recoger un escudo que nos hacen invencible durante un periodo corto de tiempo y que la inmensa mayoría de veces es bastante inútil ya que se recogen en zonas que no son especialmente complicadas de por sí.  Algunos enemigos liberan llaves con las que abrir posteriormente cofres o liberar cautivos, que nos proporcionarán en la mayoría de casos flechas especiales. Las flechas, además de la normal, incluye por lo general,  unas con fuego/magia especialmente letales pero escasas, unas que atraviesan objetos sólidos y las de ataque triple.

Como es costumbre al final de cada fase nos encontraremos el consabido jefe final, en ocasiones algún boss intermedio.

El juego se presenta con una estética de 16/32 bits. El diseño artístico usado puede gustar más o menos pero desde luego no es del todo malo. Y la banda sonora está realmente bien. Quizás peque de animaciones un tanto simples.

El problema de este juego está principalmente relacionado con el control tosco que a veces no responde como a uno le gustaría y la detección de colisiones. Nuestro personaje es considerablemente grande y la caja de impactos incluso más aún, el resultado es que en muchas ocasiones consideraremos que nos han dado de forma injusta y que era prácticamente imposible esquivar ciertas cosas. Los bosses son especialmente irritantes en este sentido. Sus patrones son simples, pero debido a lo que acabamos de comentar resultan complicados de esquivar. En ocasiones la mejor estrategia es llegar con ataques especiales preparados y lanzarlos pronto. O valorar estrategias evasivas no basadas en intentar saltar proyectiles, que suele fallar bastante y ser poco predecible. El doble salto en muchos casos nos hará creer que saltamos por encima de algo pero acabamos recibiendo daño igualmente.

Otra cosa irritante del juego es lo injusto que es también con las mejoras. Si recibimos un impacto, aunque solo sea uno, perderemos cualquier mejora que hayamos obtenido del disparo normal o del cargado. Pero si perdemos una vida, también perderemos la mejora de la vitalidad obtenida hasta ese momento y todas las esferas. Esto último puede ser especialmente frustrante, porque si estábamos acumulándolas con el objetivo de conseguir alcanzar el numero necesario para lanzar, por ejemplo, la invencibilidad temporal para llegar a un boss con algo más de garantías, todo se va completamente al traste. Acumular de nuevo 60 esferas que nos piden para esa invencibilidad es inviable partiendo desde el punto de control donde nos dejan de nuevo. Sólo podremos optar a lanzar el ataque del lobo, ya que nos suelen "regalar" 30 esferas para poder tenerlo disponible antes de un jefe final. Eso reducirá nuestras opciones.

La conclusión es que a menos que se juegue muy bien, la mayoría de veces el único ataque especial que podremos lanzar es el lobo al ser el que menos coste tiene.

El juego por lo tanto está pensado para jugar mucho y ser capaces incluso de completarlo con una sola vida, que ya es decir, ya que se pierden muchas mejoras al morir y sobre todo esferas. Puede llegar a ser factible, ya he podido llegar hasta la fase 6, por ahora no he insistido más con el juego. Las últimas fases tienen zonas de plataformas bastante complicadas, ni que decir tiene que caerse al vacío implica la muerte directa. Perder todo por un mal salto o porque el personaje no saltó cuando queríamos puede enfurecer a cualquiera.

El juego está realmente bien si te gusta el género, aunque esperaba quizás un pelín más de él. El punto de frustración que causa el control y la hitbox no deberían existir. Aun así es un gran juego de jugabilidad y estética clásicas. Disponible en PS4 y Switch.